Dice que se va pero no es cierto. El déspota jorobado no se ha ido a ningun lugar, si acaso regresa al mismo lodazal inmundo del que salió y al que volverá, eso sí, más rico de lo que nunca soñó convertido en miembro privilegiado de una casta de vividores a costa del trabajo ajeno, en trasunto de plusvalías con las que regar la proporción áurea de sus jardines colgantes galapagareños.
Pablo, no me jodas, para morir como uno ha vivido hay que tener dignidad y tú careces de ella. Seguirás berreando soflamas caducas en las televisiones de los facinerosos como Roures, como empezaste: es tu destino circular de siervo al servicio de totalitarios millonarios. Allí, entre ellos, tendrás tu riconcito, allí recojerás las migajas que caen de sus altares. En la dialectica de amo esclavo, Pablo, eres un esclavo. Tu parnaso es el horizonte nauseabundo en el que se refugian los cobardes. Pablo, morirás olvidado, arrastrado por todo el daño que has causado, apartado como un intocable en los margenes del Leteo.
Pese a que te lo hayas creído no has sido jamás icono de nada al margen de ídolo de ocasión para los lamecazuelas que has comprado al miserable precio de una prometida paga. De muñeco de ventrilocuo has devenido guiñapo en manos de' feirantes', en vulgar Chacolín con estaca. Todo en ti es una gigantesca farsa, eres el heroe de una gigantomaquia de papel maché, pero no temas Pablo, aguarda, no te irás solo, a tu diestra y siniestra caerán también los demás falsarios. Toda la canalla se precipitará en su abismo de soberbia. Pablo, has de saber que yo no te olvidaré, no te perderé nunca de vista, nunca te daré la espalda. Sé que de tu muda de reptil ya han salido otros cuatreros a los que habrá que oponerse sin tregua.
Pablo, no has renunciado a nada . Se trata solo de que te han convidado y has aceptado la invitación abandonando a los mendrugos que han creído o creen en ti, todavía. Pablo, no vales más que el espacio reducido de tu nido de serpiente, esa es tu verdadera dimensión.
A pesar de todo Pablo, no me niegues que no hay cierta justicia poética en que a un forajido como tú lo haya descabalgado una mujer.
Let's be careful out there
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