sábado, 19 de septiembre de 2020

Nadando en la laguna estigia.

Funes el memorioso. J.L.Borges (extracto). No sólo le costaba comprender que el símbolo genérico 'perro' abarcara tantos individuos dispares de diversos tamaños y diversa forma; le molestaba que el perro de las tres y catorce (visto de perfil) tuviera el mismo nombre que el perro de las tres y cuarto (visto de frente)

El  consejo de ministros se ha convertido en una cocina  de metaconceptos. En cada rueda de prensa posterior al mismo, el avatar ministerial de turno nos informa desabrido de los acuerdos adoptados, con el mismo desparpajo con el que un carnicero te vende un kilo de filetes sin madurar. Luego, a la hora de la verdad, puestos cada uno en su debida sartén, espuman agua. 

Así, el anuncio del anteproyecto de ley de la Memoria Democrática: un Macguffin destinado a perturbar  la realidad, otro paso más en el desmantelamiento de la Monarquía constitucional y la imposición de un régimen corrupto y despótico  sustentado en la mentira , la corrupción,el enfrentamiento y el odio.

Un texto con 66 artículos que se agrupan en 5 títulos, estructurados en torno al protagonismo y la reparación integral de las víctimas de la Guerra Civil y la Dictadura, así como a las políticas de verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición. Toma del frasco carrasco

Escuchando la jerigonza  de la vicepresidenta Carmen Calvo no he podido evitar el repentino  brote de un sudor contra el  que no hay talco eficaz. Pese a ello, echaré mi cuarto a espadas.

Todo el alegato empleado para justificar la necesidad de la  desmemoriada ley, parecía urdido por un sujeto puesto hasta las grecas de crack  o bajo los efectos de la metanfetamina.

Del protagonismo de los 50.000 muertos por la Covid y su reparación integral , de todas las  mentiras con las que nos toman el pelo a diario,  de lo ocurrido y lo que te rondaré morena, o de las medidas tomadas para la garantía de no repetición de la extensión de la pandemia: Nada; se ve que para la señora Calvo y sus secuaces los muertos recientes por la pandemia son muertos secundarios, de serie B. 

No es necesario ningún Buldócer para desenterrarlos, ningún  Banco de  ADN  conserve  su memoria, o la creación ad hoc de una  nueva sala fiscal que husmee el ron en el cofre de los muertos. Los tiene ahí, frescos, delante de sus narices.  De las víctimas en las cunetas se encarga el O61.

Pero es que, en definitiva, no se trata de recuperar o de  restituir algo  a alguien, se trata de desbrozar todo aquello que  impida la puesta en marcha de su experimento político. 

De manera que, al amparo legal  de una raquítica mayoría parlamentaria sostenida por juglares populistas , aventureros separatistas  y canallas sin más ,el gobierno se dispone a cambiar el tablero y las reglas del juego . Claro que, todo el plan se vendría abajo sin la necesaria e  imprescindible colaboración de unos medios de comunicación menesterosos del tratamiento paliativo de la subvención, dedicados a justificar cuando no a aplaudir la acción de un gobierno  dispuesto a solapar su  responsabilidad política en  un atolladero de administraciones ineficaces, evitando de esa forma asumir, la nefasta gestión que nos ha convertido en los líderes europeos del contagio y el endeudamiento, llevándonos más allá del límite de nuestra resistencia.

 Por ende, los contribuyentes, es decir, quienes pagamos  la carne, convertimos el agua en vino, y costeamos los picos y las palas, ahí  seguimos, entretenidos, jugando al corro de la patata.

 En cuanto a la oposición: nada cabe esperar de un vaciadero de basura. Casado, ese diputado por  Ávila  y sus mariachis, flotan en el Cocito  de su corrupto pasado en espera de una pértiga.

 Tucídides fue  el primero en observar la mutación del significado de las palabras que se produce en las situaciones revolucionarias, en virtud de la cual, vocablos que hasta entonces significaban valores reconocidos, son usados para expresar los vicios opuestos.

Cabe preguntarse,¿Cómo hemos llegado hasta aquí?

No es  el Coronavirus el principal causante  de nuestra  descomposición moral como pretenden que creamos. El miedo viaja dentro del virus, debilita   nuestra voluntad, expone nuestras miserias, desata nuestro rencor. El miedo nos delata, permite que un atajo de mediocres manejados por un déspota nos gobierne. Pero la causa es otra. 

Comenzó en la mutación de una democracia representativa en un simulacro, cuando permitimos la manipulación de la opinión pública, la corrupción, cuando alimentamos el ego de nuestros dirigentes y nos tragamos toda su demagogia, cuando  nuestro futuro comenzó a arder delante de nuestros ojos y, vacuos, nos abandonamos en su contemplación, cuando nos convencieron de que un Rembrandt  puede utilizarse como una tabla de planchar. Si, podríamos decir que todo comenzó,de forma exacta, a raíz  de aquel convencimiento. 

¿ Bajo qué circunstancias obedece la gente?, ¿Cuándo llega al punto en el que deja de obedecer?

( Extracto del inicio de la extraordinaria novela De Ray  Bradbury," Un sonido atronador")

"El letrero de la pared parecía vibrar como si una película de agua tibia se deslizara por él. Eckels sintió un parpadeo sobre su mirada, y fue en esa oscuridad fugaz donde el cartel se encendió: SAFARI EN EL TIEMPO S. L. SAFARIS A CUALQUIER AÑO DEL PASADO. USTED ELIGE EL ANIMAL. NOSOTROS LE LLEVAMOS. USTED DISPARA. En la garganta de Eckels se formó una flema tibia; tragó para hacerla descender. Los músculos de la boca formaron una sonrisa cuando levantó despacio la mano con un cheque de diez mil dólares y lo agitó delante del hombre del mostrador. —¿ Este safari me garantiza que voy a volver con vida?

—No garantizamos nada —dijo el dependiente—, excepto los dinosaurios. —Se giró—. Este es el señor Travis, su guía del safari en el Pasado. Él le dirá a qué y dónde disparar. Si le dice que no dispare, no dispare. Si desoye sus instrucciones, a su vuelta se le impondrá una sanción de otros diez mil dólares, además de posibles acciones gubernamentales."

Remember me, my Dear. Jan Garbek and the Hilliard Ensamble.

Let's be careful out there. 


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