viernes, 10 de abril de 2020

BWV 244.


La Nature est un temple où de vivants piliers
Laissent parfois sortir de confuses paroles;
L'homme y passe à travers des forêts de symboles
Qui l'observent avec des regards familiers.
Comme de longs échos qui de loin se confondent
Dans une ténébreuse et profonde unité,
Vaste comme la nuit et comme la clarté,
Les parfums, les couleurs et les sons se répondent.
II est des parfums frais comme des chairs d'enfants,
Doux comme les hautbois, verts comme les prairies,
 Et d'autres, corrompus, riches et triomphants,
Ayant l'expansion des choses infinies,
Comme l'ambre, le musc, le benjoin et l'encens,
Qui chantent les transports de l'esprit et des sens.
 Charles Baudelaire

La Naturaleza es un templo donde vividos pilares
Dejan, a veces, brotar confusas palabras;
El hombre pasa a través de bosques de símbolos
que lo observan con miradas familiares.
Como prolongados ecos que de lejos se confunden
En una tenebrosa y profunda unidad,
Vasta como la noche y como la claridad,
Los perfumes, los colores y los sonidos se responden.
Hay perfumes frescos como carnes de niños,
Suaves cual los oboes, verdes como las praderas,
Y otros, corrompidos, ricos y triunfantes,
Que tienen la expansión de cosas infinitas,
Como el ámbar, el almizcle, el benjuí y el incienso,
Que cantan los transportes del espíritu y de los sentidos.
Charles Baudelaire.

Séneca lo ha dicho: el primer indicio de un espíritu bien ordenado es poder detenerse y permanecer consigo mismo; y Pascal ha descubierto que toda la infelicidad de los hombres viene de una sola cosa, que es no saber permanecer quietos en una habitación. 
En la quietud de mi habitación, ante la finísima luz del alba, el coro introductorio  de la pasión según San Mateo."Venid hijas llorad conmigo. Mirad…", perfilando mi corazón, ha contraído el espacio.
De cuantas manifestaciones de la grandeza ha hecho gala el hombre, ninguna me sobrecoge tanto como la pasión según San Mateo de Bach. Por eso, cuando su madre me telefoneó  para decirme " es un niño", sentí en mi ombligo las primeras patadas de mi hijo Mateo.
Todo en esa música es una trayectoria inmensa, inabarcable, un camino que conduce desde la tristeza a la esperanza y el consuelo, que nos deja en el centro mismo del misterio, que nos abisma  en una revelación estática. Existe en Bach esa extraordinaria conexión en la que sientes que te diriges a un espacio superior porque es tuyo, personal. Es decir, desde ese Ich , hablas de ti, de cómo te sientes, desde ese Ich  tomas conciencia de que pudiste hacer las cosas de otro modo, de que pudiste evitarlo pero no lo hiciste, y de que debido a ello, Él, se sacrifica por ti, y" en jadeantes semicorcheas ( en bellísima expresión de Eugenio Trías)   carga con el pesado fardo de nuestros pecados" Para salvarte. Para salvarnos. 
Todo el peso de la culpa es una paca imponderable que cargamos sobre nuestras espaldas y arrastramos sobre nuestro devenir con tristeza indecible. Con Bach revivimos las angustias y los tormentos de ese cordero presto al sacrificio que se encamina hacia el Gólgota, y que se inmola como víctima inocente y propiciatoria para redimirnos de nuestra servidumbre respecto a la muerte. 
De modo que, nadie que se adentre en la Pasión de Bach, a menos que sea un desalmado o un cobarde, sale indemne del envite, del mismo modo que nadie es el mismo después de ver la  exquisita sutileza con la que Pasolini ( Vangelo secondo Matteo) utiliza la anatomía de la espalda como geografía expresiva.

De repente, recuerdo la foto, portada del diario el Mundo, con los féretros dispuestos en asombrosa simetria cartesiana, y se abre ante mi ( noveno círculo del infierno, gélido cocito ) un paisaje inerme, desgarrador, espejo de nuestra  debacle.
En su  extraordinaria obra" El diálogo", Catalina de Siena tiene un bellísimo capítulo sobre las lágrimas"... Lágrimas de temor por los propios pecados: el temor les hace llorar. Su motivación no es perfecta, pues no hay necesariamente arrepentimiento…"
Dice el poeta y viajero  árabe Al Ghazal que " cada lágrima es una joya llena de luz en la que puedes ver tu camino por la oscuridad y cómo seguir avanzando. Cada lágrima es una joya que te purifica." . 
 Pues bien, La pasión según San Mateo de Bach te ayuda a llorar. No sientes que tienes que dejar de llorar, su música contiene todo el dolor de una lágrima.
Por eso comprendo que el mejor invento del hombre es Dios( no el Dios de la iglesia ,entiéndase , sino el Cristo humano, en todo su sentido de la trascendencia), y su tragedia, la de todos nosotros, es el resultado  de nuestra arrogancia, de ahí toda mi tristeza, todas mis lágrimas.
 Cargamos con una cruz de la que no sabemos  su peso ni si podremos soportarlo. Todo está  por ver.
Y entonces, de nuevo, Bach
Escribe Eugenio Trías en su libro de obligada lectura " El canto de las sirenas", la  empatía que la pasión según San Mateo promueve en cualquier audiencia muestra la capacidad que esa obra posee para aniquilar en un abrir y cerrar de ojos, decenios , siglos de distancia y lejanía entre el mundo de Bach y el mundo actual , en el que es posible revivir...un páthos que nos permite con- sentir con esos misterios dolorosos a los que nos aproxima."
El Evangelio de Mateo destaca el carácter humano de la figura de Jesús.  Jesucristo es víctima, siempre víctima sacrificial, nunca sacerdote. Es Víctima inocente, es un Cristo que se angustia, que teme , que tiembla, que se sobrecoge, que acepta. A saber, lejos del Jesús divino del Evangelio de Juan,  es un hombre.
De modo que  lloramos por él al inicio, en el medio, lloramos al final. Ahora bien, cuál es el sentido del llanto que llevamos dentro? 
Con todo, la tristeza nos hace prisioneros de Dios:  " de qué forma se escupe ante ti, cuan lívido te encuentras!, Quién se ha ensañado de forma tan infame con la luz sin par de tu rostro"! . Quizá lo mismo suceda con la verdad (retorno a los ataúdes de la foto) de los hechos  que pretenden ocultarnos.
La tristeza siempre es un espacio que está ahí. No queremos entrar en él hasta que algo nos conduce a un lugar en el que tenemos que desistir. En el que nos rendimos y exhaustos decimos: No sé la respuesta, es demasiado para mi. Ahí, abandonamos la ilusión de que lo podemos controlar todo. Es el momento decisivo en el que conoces que no eres tú quien dirige tu vida( no del todo)  que no escribes el guión. Al llegar a este punto se produce una apertura radical en el que tu camino se detiene, y entonces el dolor te obliga a buscar algo más profundo. Esta apertura lleva a un camino nuevo de confines desconocidos.
Conviene enfatizar ( para soltar lastre), que todas las experiencias decisivas ganan en intensidad cuando integran polos contrastantes. Pasado el Rubicón,   en el vórtice de la muerte, la vida cobra su verdadero significado.
Quebrando la madrugada se extiende la sosegada meditación del coro final  ante el sepulcro. " Descansa dulcemente, dulcemente reposa. Descansad miembros maltratados, vuestra piedra  sepulcral serán para la conciencia angustiada lugar de reposo espiritual y cómodo apoyo. Llenos de satisfacción cerramos allí los ojos."
Ahora, en esta  raya de la alborada percibo la tragedia. Pero, ¿Cuál es la tragedia? No hay nada nuevo, salvo lo olvidado.
Han transcurrido  2 horas y 41' desde que el Collegium Vocale de Gante, dirigido por Philippe Herreweghe, detuvo el tiempo. Todo sucede in ictu oculis, en un abrir y cerrar de ojos.

Pasión según San Mateo. Philippe Herreweghe

Let's be careful out there.



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